Salam aleikum wa rahmatulah wa barakatuh,
he encontrado en el facebook un texto sobre el enfado que me ha encantado y quería compartirlo porque es muy importante, porque las peores cosas que hacemos, las peores obras, de las que mas sufrimos y arrepentimos provienen del enfado y el poder prevernilas es lo mejor que podemos aprender. Así que os copio el texto y me lo imprimo para ponerlo en la nevera junto con las cosas a recordar.
ME ENFADO... ¿QUE HAGO?
El enfado corrompe el carácter, las acciones, los intelectos y es el punto de origen de todo el mal. Le dijeron a ‘Abdullah Ibn Mubarak: “Reúne para nosotros todas las nobles cualidades de carácter en una sola frase”. Dijo: “Dejar el enfado”.
Cuando un hombre fue a ver al Mensajero, al que Allah colme de bendiciones, pidiéndole su consejo, le dijo: “No te enfades”. Y se lo repitió repetidas ocasiones. (Rawahul Bujari ‘an Abi Hurairah).
Ser capaz de controlar la ira, de controlarse durante el enfado, es una muestra de fuerza y valentía. Dijo el Mensajero, al que Allah colme de bendiciones: “No es el fuerte el que siempre vence (o vence en la batalla), ciertamente el fuerte es el que es capaz de controlar su nafs en el enfado” (Rawahul Bujari wa Muslim ‘an Abi Hurairah).
La respuesta al ignorante es permanecer en silencio. En una ocasión un hombre insultó al Imam Asha’abi mencionando sus defectos, y el Imam dijo: “Si dices la verdad, que Allah me perdone, y si estás mintiendo, que Allah te perdone a ti”.
El remedio ante el enfado es volverse, buscar refugio en Allah, diciendo “a’udhu billah mina ashaitan arrayim”. El Mensajero vio en una ocasión a un hombre, presa del enfado, con el rostro rojo de ira y dijo: “Yo conozco unas palabras que si las dijera se iría de él lo que tiene (el enfado): a’udhu billah mina ashaitan arrayim” (Rawahul Bujari wa Muslim ‘an Sulaiman Ibn Suradin).
Permanecer en silencio es también otro de los remedios. Dijo el Mensajero, al que Allah colme de bendiciones: “Si alguno de vosotros se enfada, que se calle” (Rawahu Ahmad ‘an Ibn ‘Abbas).
Hacer wudu es también otro remedio. Dijo el Mensajero: “El enfado es del Shaytán, Shaytán fue creado de fuego y el fuego se apaga con agua, así pues, si alguno de vosotros se enfada, que haga wudu” (Rawahu Ahmad ‘an ‘Urwata ibn Muhammad).
Cambiar la posición en la que estás también ayuda a controlar el enfado. Dijo el Mensajero: “Si se enfada alguno de vosotros y está de pie, que se siente para que se le pase el enfado; si no se le va, que se recueste” (Rawahu Abu Daud ‘an Abi Darr).
Quien se enfade debe intentar recordar la indulgencia que Allah tiene con él, debe temer Su Castigo; el Poder de Allah hacia él es más grande que el poder que tiene él hacia aquello con lo que se ha enfadado; que recuerde todo aquello a lo que le puede conducir el enfado, el arrepentimiento que vendrá después, las consecuencias… El creyente debe ser capaz de saborear la indulgencia y el buen trato. La dunia y sus asuntos no son suficientes para enfadarse, y mucho menos para que lo hagan los musulmanes entre ellos.
El que no sea indulgente que se esfuerce en serlo, que se acostumbre y se imponga esta noble cualidad.
Fuente: http://www.facebook.com/pages/Camino-al-Yannah/184423698264880
Assalamu aleikum.
ResponderEliminarMuchas gracias por un consejo tan bueno.
Y es verdad que cuando nos enfadamos podemos hacer las peores cosas. Yo me di cuenta de que podía decir enfadada palabras injustas de las que luego me arrepentía mucho.
Lo que procuro ahora, si no puedo controlar el enfado, es al menos intentar no hablar. Prefiero esperar un tiempo a que se me pase y luego hablar para solucionarlo, pero ya con tranquilidad.
Y Ramadán, que ya está cerca Insha Allah, es un buen momento para hacer este esfuerzo, cuando la mente y el espíritu están por encima de los impulsos del cuerpo.
Waleikom salam!Que buenos consejos ukhti sobre todo a los que tenemos pronto como yo jeje. Es algo que se puede mejorar si nos mentalizamos. Gracias y besitos!!. Y.
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